Narcissus Paperwhite-Narcissus Papyraceus

 

Narciso Paperwnite o Narciso «Blanco de Papel» es una planta bulbosa perenne perteneciente a la familia Amaryllidaceae y al genero «Narcissus». Son originarios de distintas zonas próximas al mar Mediterráneo, del sur de Portugal, de España, Italia y Grecia y zonas del norte de África. Sus bulbos son de tamaño medio, redondeados y puntiagudos, forma matas densas y redondeadas de hojas alargadas de color verde.

 

 

 

Es una planta bulbosa de crecimiento alto de entre cuarenta a sesenta centímetros de altura. Las hojas se desarrollan agrupadas directamente desde el bulbo subterráneo, son alargadas y estrechas de color verde y extremos delgados, crecen de forma erecta o ligeramente curvada hacia el suelo.

 

 

 

De mediados de invierno o principios de primavera desarrolla tallos florales cilíndricos y carnosos altos, en cuyo extremo surgen las flores reunidas en pequeños grupos. Las flores son tubulares de color blanco puro y constan de seis pétalos perfectamente dispuestos, los estambres amarillos crecen en el interior de una fina estructura redondeada sobresaliente de color blanco luminoso al igual que el resto de la flor. Las flores son pequeñas de entre dos y tres centímetros de diámetro, son muy aromáticas, desprenden un aroma muy agradable.

 

 

 

 

Situación soleada o parcialmente soleada, las flores duran mas tiempo en un emplazamiento parcialmente soleado. Narciso «Paperwhite» se puede cultivar en exterior en climas de temperaturas invernales moderadas durante todo el año. Es muy popular cultivado en interior como planta de interior, utilizando bulbos «forzados» que se han expuesto por algunos meses a temperaturas frías y al colocarlos en un interior caldeado empiezan a crecer y a florecer.

 

 

 

Se cultivan en interior durante el invierno, especialmente durante las fiestas navideñas y en climas de temperaturas frías. Se siembran en pequeñas macetas o se utilizan en cultivos hidropónicos, simplemente utilizando agua y bolas de arcilla, colocando los bulbos forzados en recipientes. Quedan especialmente decorativos en jarrones o recipientes de cristal bajos y redondeados. Poco a poca irán desarrollando raíces entre las bolas de arcilla que les servirán de sujeción y poco a poco crecerán sus hojas y tallos florales. Los Jacintos son otros de los bulbos de extraordinaria belleza y aroma que se cultivan frecuentemente en cultivo hidrópico en interior durante el invierno.

 

 

 

Si queremos cultivaros en interior es recomendable sembrarlos de cuatro a seis semanas antes, para que florezcan en el momento deseado. Si queremos que florezcan en navidad por ejemplo, los sembraremos durante la primera semana de noviembre. Los colocaremos en macetas profundas con un sustrato rico en nutrientes bien drenado, colocaremos una capa de bolas de arcilla en el fondo del recipiente y mantendremos las macetas a temperaturas de alrededor de veinte grados.

 

 

 

 

Sembraremos los bulbos en exterior en otoño en climas de temperaturas adecuadas, con el extremo mas estrecho hacia arriba. Deben pasar un periodo de temperaturas frías durante el invierno, para que broten y florezcan a finales de invierno o principios de primavera. Seleccionaremos bulbos sanos y grandes que estén duros y en los que no se aprecien deformaciones o manchas y los introduciremos en la tierra profundos, al menos del doble del tamaño del bulbo, si los sembramos demasiado superficiales al crecer la planta se inclinara al no quedar bien sujeta en la tierra.

 

 

 

Los riegos en época de crecimiento deben ser regulares evitando empapar el sustrato, dejaremos secar la tierra entre riegos para evitar que la tierra permanezca demasiado húmeda y los bulbos se pudran. Si los cultivamos en macetas o jardineras prescindiremos de platos, o colocaremos una capa de pequeñas piedras entre el plato y la base de la maceta, para evitar que el agua sobrante del riego quede en contacto con la base de la maceta, provocando ataques de hongos y pudriciones.

 

 

 

En primavera, cuando la floración a finalizado las hojas empiezan a amarillear, cuando están secas cortaremos todas las hojas para mantener el terreno limpio y saludable y evitar la proliferación de plagas. En climas de temperaturas invernales moderadas mantendremos los bulbos enterrados en la tierra durante el invierno. En climas fríos de temperaturas extremas y heladas frecuentes, los extraeremos de la tierra, los dejaremos secar y los guardaremos en un lugar seco y oscuro hasta el momento de la plantación. Los bulbos no resisten las heladas.

 

 

 

Se reproducen por división de matas, los bulbos maduros desarrollan pequeños bulbos a su alrededor que con el tiempo pueden separarse y sembrarse separadamente, pasado un tiempo cuando madure también florecera. Separaremos  los bulbos cuando toda la vegetación se haya secado meses despues de la floración.

 

 

 

Los Narcisos son plantas fáciles de cultivar de poco mantenimiento, no suelen tener problemas con plagas ni enfermedades en buenas condiciones de cultivo. Proporcionarle un sustrato suelto y rico en nutrientes que contenga arena para asegurar el drenaje. El exceso de agua y humedad del sustrato junto a un drenaje insuficiente son los principales enemigos de las plantas que ocasionan ataques de hongos y pudrición de bulbos. DIFICULTAD BAJA.

 

 

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