Rhipsalis Pilocarpa

 

Rhipsalis Pilocarpa es una planta perenne perteneciente a la familia Cactaceae, Este cactus es originario de Brasil, donde se desarrolla como una planta epifita, es decir no, en su habitad natural no necesita estar plantada en tierra, ya que crece de forma colgante sobre otras plantas, generalmente enganchadas en las ramas de los arboles. En la actualidad se cultivan en maceta para que podamos disfrutar de ellas en cualquier rincón, como planta de interior y en exterior en climas de temperaturas invernales adecuadas.

 

 

 

 

Ejemplares jóvenes cultivados como planta de interior.

 

 

Es una planta perenne que se cultiva en exterior o en interior, dependiendo del clima de cultivo. Es una planta muy ramificada, de crecimiento denso, sus tallos son delgados, cilíndricos y colgantes están cubiertas de una especie de pelos cortos y finos. Sus flores surgen agrupadas en el extremo de sus hojas, son de color blanco de algo mas de un centímetro de diámetro. Las flores dan lugar a frutos globosos ligeramente ovalados, de color rojo, con mechones de pilosidades de color blanco.

 

 

 

 

Flores de color blanco cremoso, desarrollándose en el extremo de los tallos.

 

Frutos globosos de color rojo, pilosos.

 

Los tallos son de color verde que pueden volverse purpuras cuando están expuestos a los rayos solares. Es una planta colgante que con el tiempo puede llegar a crecer mucho. Las plantas adultas pueden florecer cada uno o dos años. Esta planta no tiene espinas ni hojas.

 

 

 

 

Prefiere una ubicación a la sombra, sobretodo durante el verano con temperaturas altas, mejor que no superen los treinta grados para que la planta no sufra. Puede recibir algunas horas de sol matutino en invierno o principios de primavera, pero por la tarde prefiere un emplazamiento totalmente sombrio.

 

 

 

 

En invierno necesita más luz, incluso algo de sol diario es aconsejable, si las temperaturas se aproximan a cero grados hay que proteger, no soporta las heladas. La tierra de cultivo debe ser rica en arena gruesa para asegurar un buen drenaje.

 

 

 

 

 

Necesita un riego muy moderado, sobretodo con bajas temperaturas, habrá que ir aumentando los riegos, a medida que las temperaturas vayan subiendo. Es esencial un drenaje excelente. Abonar una o dos veces al mes con abono de cactus entre primavera y final de verano.

 

 

 

 

No suele ser atacada por plagas, los hongos son su primordial causa de enfermedades y pudriciones, para evitarlas mantendremos la planta en buenas condiciones, evitando exceso de agua procedente del riego o de la lluvia. Se multiplica por semillas o esquejes de tallo. GRADO DE DIFICULTAD BAJO.

 

 

 

 

 

 

 

 

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