Aloe Espiral-Aloe Polyphylla

El Aloe Polyphylla es una planta crasa o suculenta originaria del Reino de Lesosto, situado en el sur de África y rodeado por Sudáfrica. Es una planta de poca altura, de crecimiento compacto, no genera largos tallos como otras plantas crasas. Desarrolla hojas que crecen de forma espiral, puede llegar a general cuatro o cinco niveles de hojas. Cada nivel puede estar compuesto de mas de quince hojas, dependiendo del diámetro del nivel. A medida que la planta crece los niveles inferiores tienen un diámetro mayor.

En su país de origen crece en alturas elevadas, donde hay bastante lluvia y altos grados de humedad debido a las nieblas frecuentes. Si se cultiva fuera de su lugar de origen hay que proporcionarle unas condiciones optimas de cultivo, ya que sufre con facilidad. Las plantas jóvenes no forman espiral hasta que maduran.

Su forma en espiral, hace de esta planta suculenta un ejemplar muy valorado y decorativo. Sus hojas son carnosas, de color verde grisáceo, son anchas en la base, terminadas en punta coronada por una espina. Los bordes de las hojas presentan espinas. Las puntas de las hojas tienden a volverse de color marrón, y ha secarse buena parte de ellas, en especial de las hojas adultas, situadas en los niveles inferiores de la planta.

Sus flores surgen reunidas pueden ser de color rosado o amarillo. Suele florecer de finales de verano a principios de otoño. No florece hasta que no es una planta adulta. No le gustan las temperaturas muy altas, en su lugar de origen soporta temperaturas nocturnas invernales de diez grados bajo cero e incluso mas, durante el día las temperaturas pueden oscilar entre diez y quince grados. Es un clima frió, en el que en verano, las temperaturas no exceden de veintidós grados.

Podemos situarla en emplazamientos soleados o parcialmente soleados, resiste exposiciones ventosas, aunque el viento reseca sus hojas, puede aguantar climas con inviernos fríos, ya que crecen en montañas donde nieva en invierno, cubriendo las plantas. Prefiere un sustrato de plantación arenoso, que contenga una buena cantidad de áridos, para asegurar un drenaje perfecto. No abonar la planta, ya que si crece demasiado deprisa no forma espiral.

Podemos regar de forma regular pero asegurando que no haya retención de agua en el sustrato, ni mojar el centro de la planta. Procede de un área de frecuentes lluvias. Los ejemplares adultos resisten periodos de sequía, por lo que podemos regar quincenalmente si el clima no es excesivamente caluroso. Las plantas jóvenes necesitan riegos frecuentes. No retirar las hojas dañadas, hasta que estén totalmente secas, así evitaremos dañar la planta.

El exceso de lluvia puede dañar las plantas jóvenes, es mejor resguardar las macetas bajo un porche, las adultas aguantan mejor la lluvia. Se reproduce por semillas. Hay que mantener el sustrato húmedo sin dejar que se seque por completo, durante los primeros quince o veinte días. Las plantas pequeñas necesitan un suelo con cierta humedad para desarrollarse correctamente. No suelen tener problemas con plagas ni enfermedades en condiciones adecuadas de cultivo. DIFICULTAD MEDIA.