Cytisus Maderensis

 

El Cytissus  Maderensis es una planta arbustiva muy resistente. Es originaria de Madeira, Canarias y de la región mediterránea. Es una planta de crecimiento redondeado, con largas ramas que se curvan hacia los extremos de la planta, sus hojas son alternas y pueden tener varios lóbulos o divisiones, o ser enteras.

 

 

Sus hojas son perennes o parcialmente perennes dependiendo del clima en el que se cultiven, son de color verde brillante. Es un arbusto muy resistente, utilizado frecuentemente en jardinería. Es adecuado para jardines sostenibles y de bajo mantenimiento, una vez bien enraizado sobre el terreno puede aguantar periodos de sequía.

 

 

 

Florece desde abril a mediados de verano, sus flores son amarillas y suavemente perfumadas, aportan mucha luz al jardin o a la terraza. Nacen reunidas en espigas terminales que sobresalen por encima del follaje. Podemos sembrarlas directamente en el suelo del jardín o en macetas, para la decoración de terrazas. Los ejemplares adultos cultivados en tierra, pueden medir hasta dos metros de altura.

 

 

Exposición soleada donde crecerán bien y florecerán abundantemente, en situaciones demasiado sombreadas, las plantas no florecen y crecen muy espigadas, necesitan mas sol directo. Prefieren un sustrato suelto, alcalino y con un buen drenaje, aunque pueden adaptarse a otros tipos de suelo, a condición de que tengan un drenaje excelente.

 

 

 

Regar regularmente los ejemplares jóvenes y recién trasplantados, las plantas adultas pueden aguantar periodos de sequía, no regar en exceso, son sensibles al exceso de humedad en el terreno de plantación. Las plantas cultivadas en maceta necesitan riegos más frecuentes. Ir distanciando los riegos a medida que las temperaturas bajen.

 

 

Sus frutos tienen forma de vainas, en principio de color verde, que tornan a color marrón a medida que van madurando, en su interior se forman las semillas. Si queremos reproducir la planta por semillas, esperar a que estén totalmente maduras antes de recolectarlas.

 

 

 

Puede resistir heladas débiles, pero perderá parte de sus hojas. Podar el extremo de sus ramas al final de febrero, para mantener los arbustos mas compactos, despues de la floración podemos cortar las flores secas para evitar que fructifiquen, y la planta se agote, o dejar fructificar solo parte de ellas.

 

 

Se reproduce por semillas o por esquejes en primavera, colocar a media sombra y mantener el sustrato húmedo. En la reproducción por esquejes, es mejor utilizar hormonas de enraizamiento, para facilitar que los esquejes creen raíces y prosperen. Cuando tengan al menos dos pares de hojas nuevas estarán preparados para su trasplante.

 

 

Es una planta muy rustica, no suele ser atacada por plagas y enfermedades. Su principal enemigo es, al igual que en muchas otras plantas, el exceso de riego. Regar con precaución sobretodo con temperaturas bajas, evitar que el agua quede retenida en sus raíces.

 

 

Si la cultivamos en macetas es aconsejable no utilizar plato bajo ella, para que el agua drene libremente, También es aconsejable colocar algunas piedras o grava volcanica en el hueco de plantación o en el fondo de la maceta, para asegurarnos un buen drenaje. DIFICULTAD MUY BAJA.

 

 

 

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