Oxalis Bowiei
Oxalis Bowiei es una planta herbácea perenne originaria «Easthern Cape» en Sudáfrica, pertenece a la familia Oxalidaceae. Forma matas redondeadas que cubren el suelo. Es una planta de baja altura que no suele superar los veinte o veinticinco centímetros de altura, forma montículos de hojas ligeramente colgantes. Su crecimiento decae con la subida de temperaturas de primavera, en verano la vegetación desaparece para brotar de nuevo a finales de verano cuando las temperaturas se suavizan. Actualmente se ha naturalizado en distintas zonas del planeta, en California, Australia y en zonas del Mediterráneo.
Sus hojas son caducas, desaparecen durante el verano, no en invierno como otras hojas caducas. Tienen forma de trébol con tres lóbulos redondeados en forma de corazón, están unidos en el centro de la hoja donde se unen a su vez con un largo y finísimo pedúnculo que las sujeta, son de color verde intenso y brillantes. Las hojas se desarrollan directamente a partir de los bulbos, estos son alargados en forma de gota de agua y de color marrón.
Oxalis Bowiei florece abundantemente en otoño y puede continuar haciéndolo durante el invierno dependiendo de las temperaturas de la zona de cultivo. Las flores son muy bonitas y decorativas, crecen reunidas en tallos que sobresalen por encima de la vegetación, son de color rosa intenso y tienen cinco pétalos redondeados, con centros verdes amarillentos.
Situación soleada o de sombra parcial. Suelo rico en turba y arena gruesa, necesita un suelo de plantación muy permeable, podemos cultivarla en el suelo del jardin formando macizos bajos, en borduras o en macetas. A finales de verano y principios de otoño necesita riegos regulares ya que es cuando reinicia su crecimiento vegetativo, es recomendable mantener el suelo ligeramente húmedo pero no encharcada para evitar pudriciones en los bulbos, las plantas bien enraizadas sobre el terreno necesitan menos riegos. En primavera disminuiremos los riegos a mediada que su vegetación se estropee.
Retirar las hojas secas y estropeadas para mantener el terreno limpio y evitar la proliferación de plagas en los restos vegetales. Se recomienda su cultivo en zonas templadas, no le gusta el frió intenso pero puede soportar alguna helada puntual y suave. En verano con temperaturas altas la planta se encuentra durmiente, se mantienen sus bulbos bajo tierra hasta que broten de nuevo a finales de verano o principios de otoño.
Se reproduce por bulbos podemos sembrarlos en otoño, en pocas semanas crecerán nuevos brotes de hojas. Si disponemos de plantas grandes podemos extraer los bulbos en primavera, cuando la vegetación se ha secado por completo, colocando algunos de ellos en un emplazamiento separado, el próximo otoño nuevas plantas se desarrollaran. Se multiplican fácilmente por si mismas por lo que es aconsejable desenterrar parte de los bulbos, para que no se conviertan en plantas invasoras colonizando espacios reservados a otras plantas. Son plantas muy resistentes que no suelen tener problemas con plagas de insectos enfermedades. Es imprescindible mantener un buen drenaje para evitar la pudrición de los bulbos. En ocasiones caracoles y babosas pueden estropear su vegetación. DIFICULTAD BAJA.
