Francesillas-Ranúnculo-Ranunculus

 

Las Francesillas o Ranúnculos son plantas herbáceas pertenecientes a la familia Ranunculaceae. Son originarias de Asia menor y el Sureste de Europa. Son plantas de poca altura de veinte a veinticinco centímetros de altura y alrededor de veinticinco centímetros de diámetro. Muchas veces son consideradas plantas bulbosas, ya que si propiamente no lo son, si se pueden reproducir por trozos de raíces tuberosas que se pueden sembrar durante el otoño, como la mayoría de plantas bulbosas que florecen en primavera. Estas raíces se denominan «garras» son de color oscuro casi negro, de algo mas de un centímetro de longitud y diámetro, son irregulares y están formadas por un conjunto de raíces alargadas en forma de finísimos dedos.

 

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Sus tallos son carnosos en los que se desarrollan las hojas. Sus hojas son muy divididas de bordes irregulares y de color verde. Sus raíces son tuberosas en forma de «garra». Los capullos florales se forman en el extremo de un largo tallo o peciolo cilíndrico y carnoso, que se desarrolla desde la base de la planta y sobresale por encima de la vegetación.

 

 

 

Las flores pueden tener un numero variable de pétalos dependiendo de la variedad, algunas tienen muchísimos pétalos, los pétalos son muy delgados y crecen superpuestos, las flores son muy bonitas y decorativas ofreciendo un amplio abanico de colores.

 

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Las flores pueden ser blancas, rosas en diferentes tonos, amarillas, naranjas, rojas, granates y de varios tonos y colores en la misma flor, como rosado y blanco, son plantas muy decorativas que llenan de colorido el jardin y la terraza,  florecen desde el final de invierno hasta primavera, algunas variedades florecen hasta finales de primavera.

 

 

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Podemos cultivarlas a pleno sol pero en climas calurosos prefieren ubicaciones de media sombra o sol filtrado, donde las flores duraran más tiempo, y la floración se prolongara. Las Francesillas son adecuadas para sembrar directamente en el suelo del jardin o en macetas. En el jardin es perfecta para la creación de macizos, sembradas por grupos de un mismo color o combinando distintos colores creando un macizo multicolor. También quedan muy bien como borduras o creando composiciones junto a otras plantas con el mismo periodo de floración. Para la decoración de terrazas o balcones, las podemos sembrar en macetas o jardineras, podemos mezclar las francesillas con otras plantas de floración primaveral para crear alegres composiciones. Sembradas junto a plantas de flores blancas como Iberis o Pelodosum quedan muy bien.

 

 

 

Si las sembramos en el jardin suelen durar varios años, cuando la floración termina las hojas empiezan a amarillear hasta que desaparecen, al segundo año vuelven a brotar y suelen florecer pero mas débilmente, despues del segundo año, por lo general, no suelen volver a brotar, porque se agotan. Algunas variedades solo duran una temporada.

 

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Necesitan un sustrato suelto, rico en turba que tenga un excelente drenaje, abonar cada quince o veinte días en época de floración, con un abono mineral liquido rico en potasio. Regar regularmente las plantas especialmente recién trasplantadas, regaremos con mayor frecuencia las plantas cultivadas en macetas y en épocas mas calurosas, procurar no regar en exceso evitando los encharcamientos que pueden provocar pudriciones.

 

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Es recomendable eliminar las flores a medida que se estropeen para favorecer el nacimiento de nuevas flores. Cortar las hojas secas y estropeadas para mantener la planta saludable, retiraremos toda la vegetación marchita dejando la tierra limpia hasta el año siguiente. Resiste temperaturas bajas pero no las heladas, no soporta temperaturas superiores a dieciséis o dieciocho grados, su vegetación muere con la llegada del calor.

 

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Se reproducen por semillas o por división de los rizomas en otoño, si se almacenan los rizomas, deben protegerse de la luz y de la humedad así como del frió. Se suelen plantar por medio de unas pequeñas y negras raíces tuberosas en forma de «garras» durante el otoño para que broten al final de invierno. Es mejor tener en remojo las «garras»durante veinticuatro horas antes de sembrarlas, para que su cubierta se reblandezca, y brote con más facilidad.

 

 

Las francesillas no suelen ser atacadas por plagas, su principal enemigo es la retención de agua en el sustrato lo que ocasiona podredumbres. DIFICULTAD BAJA.

 

 

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